Poesía. Para la libertad, para el invierno y para la inmensa minoría que quiera entenderlo.
jueves, 3 de diciembre de 2015
"Un invierno propio"
miércoles, 25 de noviembre de 2015
"When it moves you"
jueves, 19 de noviembre de 2015
"Cerrado por derribo"
domingo, 1 de noviembre de 2015
Nada
miércoles, 14 de octubre de 2015
Reincidente
domingo, 6 de septiembre de 2015
Septiembre
El corazón me late a trompicones,
y tú celebras que está de moda ser diferente.
Te lo diré, lo prometo.
Me suicidaré con las palabras más puras
que puedan salir de mi pecho,
y dejaré que mis barcos
se estrellen una vez más
contra tu puerto
porque, total, ya nada importa.
Es el final del verano,
septiembre está aquí para confirmarlo.
Pero lo más importante es que lo despido contigo,
así que abre bien los ojos
para que puedas oírlo:
esta vez no estoy triste.
Los recuerdos no se acumulan,
sino que se amalgaman
como si nuestros corazones
fuesen tan puntuales
como para poder disfrutarlos a tiempo.
Hoy hemos podido. Y hoy he podido con todo eso.
Fuera está nublado, y me da la sensación
de que alguna chimenea
amenaza con encenderse.
Hace algo de frío,
y me encantaría poder estrenar ese jersey nuevo.
Pero hoy estoy dentro,
porque hoy hay algo que celebrar.
El día está colgado en mi memoria
con una chincheta,
como si fuese algo pendiente por hacer.
Más que por hacer, por recordar.
Hoy es 6 de septiembre.
P.D: "Que septiembre no nos quite la ilusión jamás"
miércoles, 2 de septiembre de 2015
"Táctica y estrategia"
A veces me resulta difícil hacerme a la idea
de que duermes sobre otra almohada,
sobre otro cuerpo, otra mirada...
el recuerdo de mis versos
cruza y vaga por tu mente,
entonces quizá merezca la pena.
sepas que lo nuestro sí que era amor.
Y que puede que no, esta vez no sea yo.
Jamás nos hemos despertado en la misma habitación
pero estoy segura de que miras al techo,
exactamente igual que yo.
Tal vez alguien sí ha encontrado el amor.
Y entonces dime, ¿en qué piensas?
¿Te acuerdas de mí cuando te
escuece el corazón?
Yo tengo la cura perfecta...
cada amanecer,
tu despertador, tu desayuno,
tus ganas de morder,
Aún no te vistas,
no enciendas la luz,
deja que mi sueño te persiga
hasta cumplirte
en esa realidad surrealista,
en la que vivo día a día
desde que, mira tú por dónde,
lo mismo no andábamos tan despistados
cuando nos hemos encontrado.
ni cuándo, ni porqué
dijiste que me querías,
que me elegías.
sin saber cómo, ni con qué pretexto,
al fin me necesitaste,
y era por amor,
como diría Benedetti,
"y viceversa".
solo rezo
para seguir siendo cada noche
la última pregunta
en la que piensas cuando te acuestas.
aprender cómo sos,
quererte como sos.
y escucharte,
construir con palabras
un puente indestructible.
en cambio
más profunda y más simple.
un día cualquiera
no sé cómo,
ni sé con qué pretexto
por fin me necesites.
lunes, 27 de julio de 2015
'Eternamente en fuga, como la ola'
el silencio frío
vistiéndose de
los centímetros
que separaban nuestros dos mundos en guerra.
pero tus besos solo viajan en esos barcos fijos
que parten hacia otras tierras,
sin pasar nunca por mi destino.
cuando te quiero cerca.
Cierras los ojos
y cambias de marea.
a la orilla del olvido.
y el naufragio se hace largo.
No quiero seguir, pero te sigo,
por si la otra opción es el precipicio
en el que caigo
cuando te busco en otros brazos
y no encuentro el sentido de tu ausencia.
desde el principio.
No sé muy bien porqué
hoy no había estrellas...
y nos hemos perdido.
Yo te espero donde siempre,
en la segunda, a la derecha...
lunes, 15 de junio de 2015
"Nunca jamás" (II)
viernes, 22 de mayo de 2015
<<¿Y si en vez de planear tanto voláramos un poco más alto?>>
La distancia, que es la unidad de medida entre tu olvido y el mío. La diferencia entre ser o estar, contigo. La diferencia entre mirar a las nubes o mirar hacia abajo y ver cómo el mundo transcurre, y ver que alguien ha roto una vida mientras que otro la ha salvado. La distancia, la diferencia, el punto de vista. Abarcarlo todo. Vamos dando tumbos y nos chocamos, y es muy difícil encontrar la distancia perfecta entre el suelo y las alas, entre tu voz y la mía, entre la piel y el amor. Entre nuestros engranajes para que la máquina gire y no haga humo y ruido y autodestrucción.
Desde arriba todo se ve distinto, y el aire da más en la cara, y te sientes más pequeña pero también más viva, y te vuelves tortuga con alas, capaz de apreciarlo todo a otra velocidad. Y yo no entiendo porqué la gente le tiene tanto miedo a las alturas, si lo que duele no es la caída, sino el golpe, con la realidad. Pero para eso estás tú, para agitar las alas cuando se tuercen las mías, para que no me caiga. Y es que en todos los cuentos hay castillos en el aire de tu risa. Y es que todos tenemos un rascacielos al que aferrarnos cuando el viento ruge muy rápido y nos desestabiliza. Ese es nuestro problema, la prisa. La cárcel. El cielo. ¿Y si en vez de planear tanto voláramos un poco más alto? Al menos lo suficiente para aterrizar en tus manos y despertar en un mundo nuevo.
jueves, 21 de mayo de 2015
Fiera
Para cuando quieras volver,
yo te espero.
Yo sigo aquí,
no me muevo.
Quiero ver la eternidad
siempre contigo,
aunque estés lejos.
Volverás.
Vuelve,
que yo te quiero.
Vuelve.
Siempre es cierto.
El siempre que te prometo
para que recuerdes,
para que nunca se te olvide
que nuestro siempre es verdadero.
Y que cuando quieras volver,
yo te espero,
que yo sigo aquí
y que no me muevo.
P.D: "Para cuando quieras volver"
miércoles, 13 de mayo de 2015
#Microcuento XI
El miedo es libre
y percatado:
solo nos mata
donde más nos duele.
A mí me dueles tú.
Nuestro amor,
quiero decir,
de tanto usarlo.
#Microcuento X
Enséñame a ser fuerte,
ayúdame a ser fuerte.
Ojalá fueras para siempre.
Resiste
al fuego,
a la marea,
a los años,
la tierra
y el aire.
Aguanta, eres fuerte.
Aguanta, yo te quiero.
Aguanta.
No me dejes sin pareja de baile.
domingo, 3 de mayo de 2015
Supermujer
ojos azules grisáceos,
esos risueños ojos cansados
que me miran con estrellas de cariño.
lejos de convencionalismos y de clases,
es de la clase de las que pueden
conseguirlo todo a base de esforzarse.
su voz es suave y firme,
como su piel, de terciopelo invisible,
escondida bajo su capa de armadura vencedora.
vida, alegría,
dolor y paz,
recuerdos,
historias que contar.
Y sus versos
son las fábulas
con las que cura
esas heridas de mi piel
que en la suya aún son quemaduras.
donde me acuna cuando despierto,
donde siempre encuentro hogar y consuelo.
Vuelvo a ser niña cuando me abraza.
aún perviven el sol, la vida y el lucero
con los que me sigue disolviendo
las ganas de morder.
retenerla,
eternizarla,
eso quiero.
Parar el tiempo,
que no pase
por ninguna de las dos,
que me sigas cantando esa canción
con la que me espantas el miedo.
tu amor eterno,
ese con el que me quieres
hasta cuando no lo merezco.
ojalá pudieses verte como yo te veo,
referente de vida, tesón y esfuerzo.
A amar me enseñaste tú también.
Supermamá, quiero ser
como tú eres, y serás siempre:
supermamá, y ante todo,
supermujer.
miércoles, 29 de abril de 2015
"Cambiemos de régimen"
tenemos siempre periodos de recesión.
Como hijos suyos que somos,
vivimos en una constante decepción
y en una grave crisis
de lo que somos, lo que queremos
lo que tenemos y lo que no.
derrochamos el amor
y luego nos pasa
que el corazón se gasta
y no queda visa
ni para una pequeña pensión.
y solo nos queda mal humor
y un poco de calderilla
por si dicen en las noticias
que vamos un poco mejor
para que se mueva la pasión
y el mercado no se estanque
y deje las arcas vacías.
porque la deuda vuelve a ser grande
y no nos queda ya tanta cárcel
para tanta mentira.
vivimos siempre en periodo de recesión,
y en la búsqueda constante de un sistema
que no nos embargue el amor
cada vez que la estratagema
de no encontrar solución
por parte de quienes gobiernan
se les queda un poco pequeña
y nos dicen que nuestro problema
es que malgastamos nuestra posesión.
para cambiar la situación,
pero no encontramos ninguna buena,
no es invertir en decepciones,
ni desahuciar corazones,
ni expropiar almas sin tierra,
ni pedir prestado a dictaduras de emociones,
ni privatizar las ilusiones,
ni pactar con besos de cualquiera,
ni atentar contra inocentes almas sinceras
o disparar a los que cuestionan el orden.
como si fuéramos inertes receptores
porque nunca aprendemos la lección:
¡que nos convencen hablando de amor,
pero solo saben hacer guerra!
a esta crisis de almas en pena
es aprender a amar mejor,
desterrar la egocracia
y estrenar una amarsecracia verdadera.
P.D: En todo estamos condicionados, incluso en la forma de amar...parece que vivimos en una dictadura emocional.
viernes, 17 de abril de 2015
A ti, que te has cansado.
se hizo real.
He sentido viajar sus ojos
por el paisaje del miedo,
tragarse los suspiros,
quedarse sin aliento
y abrazarme
hasta dejar nuestros corazones derretidos.
He sentido el tic-tac de su tiempo
acosándome las horas,
revolviendo mi memoria,
naufragando entre mis olas,
intentando encontrar esa frase
que le arranque el invierno.
He sentido su voz enmudecida,
su alegría apagada:
sonríe casi por compromiso.
Su mente está muy lejos,
junto a su esperanza.
La mía permanece viva,
cosida a su olvido.
Su silencio se me astilla
más que el miedo de verme en su ausencia
y no saber
cómo poder detenerla.
Hoy solo siento la impotencia
de querer parar el miedo,
pero el necio no espera.
Y yo solo le pido al tiempo
que esté de nuestro lado
y le diga al reloj
que se ha confundido de fecha.
P.D: Ojalá todo fuese tan fácil como ponerle el biombo a una flor para protegerla. Enséñame cómo hacerlo, Principito...
"No te rindas, por favor no cedas,
martes, 17 de marzo de 2015
Soneto I
Tan pronto estás abajo, como arriba;
tu silencio reverbera dentro de mi cabeza:
de ti depende la intensidad de mi tristeza,
y de tu amor el color de mi autoestima.
Una y mil veces juré que yo sería
tu mar en calma, tu pilar, tu fortaleza;
nunca me arrepentiría de haberte hecho esa promesa,
pero a veces es difícil permanecer sin cobardía.
Sé que no hay nadie que se te parezca,
aunque lo buscase jamás lo encontraría:
mi lluvia solo cesa cuando tú estás cerca.
No te gusta mucho mi poesía,
pero sabemos que solo así consigo que tú vuelvas
y derritas el invierno que se instala en tus pupilas.
domingo, 22 de febrero de 2015
"Por pasar, pasa la vida"
a otro invierno sin tu abrigo.
P.D: y tú no vuelves.
miércoles, 28 de enero de 2015
Microrrelato IV
De repente irrumpió el doctor en la sala y le saludó muy alegremente: –muy buenos días, señor Pérez. ¿Qué le trae por aquí finalmente? No le vi muy convencido en la consulta de hace un par de semanas-, trató de sacarle conversación mientras se ponía los guantes y encendía las máquinas correspondientes. –Bueno, no sé, ya sabe…el dolor se ha vuelto inaguantable. No puedo soportarlo más. Necesito que las cosas cambien, y yo solo no tengo la fuerza de voluntad...- respondió el señor Pérez, mientras el médico le colocaba alrededor de su cabeza aquella cinta de nailon negra con cuatro solapas que se pegaron como imanes en la calva recién estrenada del señor Pérez. –Pues no se preocupe, amigo, va a salir de aquí siendo una persona nueva, ya verá- le animó el doctor. –Eso espero- concluyó el señor Pérez. –Muy bien, señor Pérez, pues allá vamos- le advirtió el doctor –cierre los ojos.
Y también cuando finalmente le dejó: -no eres suficiente…. –he encontrado a alguien mejor… -no soy buena para ti… -nuestra relación es autodestructiva… -tienes que olvidarte de mí… De repente apareció, mirándole fijamente a los ojos, clavándole las estrellas con las que aquel día le cegó. -¿Vas a olvidarte de mí?- le preguntaba con descaro aquel recuerdo vago de aquella chica con el pelo largo, la sonrisa cautiva y actitud de rock and roll. -¿De verdad vas a borrarme de tu cabeza?-
Ella le mostró el papel de propaganda del centro con la hora de la cita. –Volví al apartamento a recoger un par de libros y lo vi sobre tu mesilla.- Le explicó. -No puedo creerme que vayas a hacer esto.- dijo acariciando suavemente su cara. El señor Pérez comenzó a llorar y abrazó esa mano posada sobre su pálida y fría tez, pero en seguida entraron un par de seguratas en la sala y se llevaron a la chica. Pérez veía cómo se marchaba y ella le susurró: -no lo hagas. El médico regresó a la sala y retomando la operación comentó: -disculpe las molestias ocasionadas. No solemos tener este tipo de inconvenientes. ¿La conocía? ¿Quién era ella?- y el señor Pérez, con una tristeza inexplicable y un cierto tono de desgana, respondió: -no lo sé.
martes, 20 de enero de 2015
Mi canción desesperada
viernes, 16 de enero de 2015
Enero
Recuerdo cuando aún
nevaba en nuestro invierno.
La nieve era
nuestro chaleco reflectante
de la señal de
'abrázame,
que tengo frío'.
Esta noche he vuelto
a soñar contigo,
a delirar
en uno de nuestros
choques fortuitos,
en los que nos encontrábamos
como si nos hubieramos estado buscando
toda la vida.
Y he vuelto a soñar
con mi barco varado
a la orilla de tu orgullo,
y he vuelto a recordar
la última vez que nos vimos,
y la primera vez en que al rozarme
cambiaste mi rumbo.
Y esta noche
enero ha vuelto a nevar,
y nos ha traído el invierno
que aún no termina de calar,
y se le acaba el tiempo.
Igual que a mí
los versos.
Supongo que es solo
que te echo de menos,
y que tengo el frío lleno
de ganas de verte,
de miedo de verte,
de necesidad de verte.
Y yo
no estoy ni bien,
ni mal.
Pero estoy sin ti,
y esa es la peor
forma de estar.
miércoles, 14 de enero de 2015
martes, 13 de enero de 2015
#Microcuento VI
Ya huele a primavera
y aún no hemos pasado por el invierno.
¿Será verdad eso de que le hemos declarado el frío y vamos ganando?
No sé si estoy preparada para librar esta batalla...
lunes, 12 de enero de 2015
José Agustín Goytisolo
domingo, 4 de enero de 2015
Mario Benedetti
Mario Benedetti fue un poeta y escritor uruguayo, nacido en Paso de los Toros (Tacuarembó, Uruguay) el 14 de septiembre de 1920, en el seno de una familia con raíces italianas. Perteneció a la Generación del 45, un movimiento social, político y cultural que aglutinó a una serie de artistas uruguayos, desde pintores o músicos hasta escritores, en torno a un nuevo clima de arte que fundó la identidad intelectual uruguaya contemporánea.